Presentando a LUIS CUETO
Director de Iberia en SHOWA
“Sera un placer sin duda, aunque muchos me conocerán pues llevo en el mundo del EPI más de 20 años. Mi trayectoria profesional, en su gran parte, ha sido desarrollada en el mundo del EPI. Durante este tiempo he podido conocer el mercado en los distintos sectores de España, Portugal y últimamente Brasil, así como he tenido la oportunidad de conocer a los mayores distribuidores especializados en muchos países y especialmente en España e Iberica. He trabajado desde el lado de la distribución siendo Jefe de Producto en uno de los distribuidores más especializados del sector. Esto me encaminó a la dirección de varios fabricantes de EPI y protección colectiva, destacando calzado, material de ergonomía y por supuesto guantes, entre otros.
Actualmente y desde hace más de 9 años, trabajo para Showa y me apasiona poder trabajar para una empresa la cual es un verdadero fabricante de guantes con 5 fábricas en el mundo, Malasia, Vietnan, Japón, Guatemala y EE.UU y una clara vocación hacia el producto de alta calidad. La merecida imagen de Showa sin duda siempre ha sido un producto PREMIUM y la innovación y hemos marcado el objetivo de convertir toda la gama de guantes a la tecnología patentada EBT (Biodegradación) ni más ni menos.
Lo más apasionante sin duda para mí, es poder trabajar con productos de alta calidad y acompañar a los clientes junto a mi equipo, en la homologación de nuestros guantes, presentando la opción más adecuada en cada momento”.
Trabajas en una compañía con historia ¿Cómo ha sido la evolución de esta?
La empresa se ha ido desarrollando internacionalmente durante más de 70 años, y cuanto más aprendo sobre ella, más me sorprende gratamente con una historia de intachables éxitos por sus innovaciones, expansión de fábricas, etc.
Podría destacar las palabras de nuestro Presidente y CEO al subrayar la ambición de seguir mejorando y buscar nuevos retos que mejoren el mercado de EPI, con el claro foco del usuario final para encontrar mayor sostenibilidad, confort y seguridad en los nuevos desarrollos.
Conscientes de los retos que tenemos por delante, nos comprometemos a ser más sostenibles y a crear guantes biodegradables. Puedes encontrar más información sobre nuestras acciones hacia la sostenibilidad
¿Hace cuántos años colaboráis con Dexis como distribuidor? Y ¿Qué ha aportado a tu empresa?
Estamos colaborando claramente desde el principio de la formación de DEXIS, dado que sus integrantes previamente han sido los principales especialistas en protección laboral que colaboraban con SHOWA.
DEXIS nos ha aportado un mayor conocimiento del mercado, así como una mayor integración de nuestra marca en los principales sectores. Nos ha mostrado también puntos de mejora por su gran experiencia en la distribución, y por supuesto destacar el gran equipo humano que lo componen. Desde aquí las gracias a todos los profesionales que forman DEXIS porque SHOWA Iberia es lo que es en gran parte por la colaboración con DEXIS.
Hemos sabido combinar el trabajo en equipo con DEXIS para que las constantes innovaciones de productos que caracterizan a SHOWA, que nacen en nuestros propios laboratorios y fábricas, hayan podido solucionar y mejorar el rendimiento y seguridad de los guantes a innumerables clientes finales.
¿Qué innovaciones tecnológicas en vuestros productos te gustaría destacar?
Aquí podríamos desarrollar mucha información, debido a que SHOWA es una empresa que posee 58 patentes de innovación.
Dichas patentes han marcado la evolución real del mercado de los guantes a lo largo de la historia, pues se le atribuye mayoritariamente a SHOWA el éxito de los modelos de guantes que hoy encontramos en el mercado.
Cabe destacar, sin ninguna duda, nuestros guantes biodegradables. Algo que hoy en día es cada vez más importante, y que fue inventado por SHOWA hace más de 10 años, cuando se lanzó el primer guante desechable biodegradable del mundo. A día de hoy, ha evolucionado notablemente, contando con 14 modelos de guantes biodegradables y muchos más proyectos por salir a la luz.
Un ejemplo indicativo sería el lanzamiento actual del modelo SHOWA 383, el primer guante biodegradable del mundo, diseñado y fabricado con materiales textiles y poliméricos. Un guante multiuso de extraordinaria sensibilidad y durabilidad para nuestros clientes. Ya que además de haber conseguido la biodegradación de materiales poliméricos, ya hemos conseguido la biodegradación de materiales de fibras textiles.
Podrías indicarnos alguna iniciativa que hace tu empresa en base a la responsabilidad social corporativa y sostenibilidad.
Sin duda para nosotros es algo vital y que está intrínseco en el ADN de la propia empresa, algo que se percibe y se hace patente cuando se visita nuestras fábricas, o cómo es el compromiso real cuando visito Japón. Disponemos de una página dedicada en nuestra página web donde puede encontrar todas nuestras acciones actuales hacia la sostenibilidad.
¿Cómo se posiciona tu empresa ante las nuevas tecnologías del mercado?
SHOWA siempre ha sido una empresa innovadora en la industria de los guantes. Cada vez que estamos superando los límites de la innovación. Nuestro objetivo es estar por delante de cualquier otro fabricante de guantes.
Se hace patente en la constante inversión en nuestras fábricas para innovación y desarrollo, y en los estudios de oportunidades de mercado. Tenemos fábricas aprovechando todas las fortalezas en los principales países del mundo.
Detrás de todo esto puedo destacar que hay más de 100 ingenieros repartidos por todo el mundo, con la clara misión de innovar y definir las mejores tecnologías en la fabricación, como puede ser la biodegradabilidad, nanotecnología, etc.
¿Cómo ves el futuro en la industria?
Nos enfrentamos a algunos desafíos como cualquier otro fabricante, como la retención de empleados, la presión salarial, la interrupción de la cadena de suministro o la inflación. Pero SHOWA lo ve como una oportunidad, por ejemplo, con nuestra ampliación de fábrica en Fayette (Alabama, EE. UU.). Para finales de 2024, la instalación podrá producir 2.400 millones de guantes al año.
Actualmente vemos que la industria está sometida a una clara presión de mejora de costes, algo que no siempre se obtiene con un producto más económico, pues lo que verdaderamente debe ser relevante es un mejor coste efectivo.